Valladolid, ¡la antigua capital de las nuevas tapas!

No mucha gente sabe que la ciudad de Valladolid fue capital de España de 1601 a 1606. Sin embargo, muchos sí saben que esta ciudad se ha convertido en la capital mundial de la tapa, gracias al rotundo éxito del Concurso Nacional e Internacional de Tapas, que se celebra simultáneamente en noviembre de cada año. Le invito a descubrir con nosotros los secretos culturales y culinarios de esta Ciudad.

1 Cuna de Reyes y cordero lechal

Valladolid es la cuna de tres reyes españoles. Se cuenta que cuando el emperador Felipe II nació en Valladolid fue secuestrado y sacado por una ventana del Palacio de Pimentel para ser bautizado en la cercana y excepcional iglesia de San Pablo. A un par de manzanas del Palacio Real se encuentra Don Bacalao, un conocido restaurante y bar de tapas especializado en bacalao. Aquí se pueden encontrar tapas creativas como el carpaccio de bacalao espolvoreado con pimentón de la Vera y rociado con aceite de oliva virgen extra de la zona o la tapa ganadora del Concurso Nacional de Tapas de hace unos años, una mezcla de dos culturas, un panecillo relleno del tradicional cordero lechal asado de Valladolid con una mezcla de especias indias y perlas Masala. Puedes maridar cualquiera de las dos tapas con los excelentes vinos rosados de Cigales, una de las cinco denominaciones de origen vitivinícolas que rodean Valladolid y probablemente la zona de vinos rosados más reconocida del país.

2 Monasterio de San Benito y mercado

Tras visitar la antigua plaza de toros octogonal de la ciudad, camine por la calle San Ignacio que conduce al Monasterio de San Benito y al antiguo Mercado del Val, un antiguo mercado restaurado delsiglo XIX que muestra una gran variedad de productos frescos. Ambos lados del mercado albergan bonitos locales de tapas.
Montellén
 es una de las mejores opciones. La carne de vacuno y el jamón ibérico utilizados para sus elaboraciones proceden directamente de la finca que la familia gerente posee en la zona de Salamanca, Carne de vacuno de la raza morucha local o auténtico jamón de la zona de la denominación de Guijuelo. Justo del otro lado del mercado se encuentra un lugar muy interesante, la Jamonería Sarmiento. Esta charcutería durante el día se convierte en bar de tapas por la noche. Dos tapas, el jabuguito y el miguelito, son un buen ejemplo de sabrosa mezcla de productos frescos de charcutería y verduras servidos sobre una tostada.

3 De la Rosaleda a la Plaza Mayor

Saliendo de la zona del mercado hacia el río Pisuerga, descubrirás un lugar muy especial, de esos a los que los visitantes dan más crédito que los lugareños. Es el Jardín de la Rosaleda, un lugar muy romántico justo al borde del río, un lugar lleno de hermosas rosas. Este es el mejor lugar para tomar un breve descanso antes de continuar con nuestra ruta de tapas.

De camino a la Plaza Mayor cruzaremos la Plaza Poniente, donde encontraremos
Brasería Poniente
otra buena opción para los amantes del jamón ibérico. A la vuelta de la esquina tenemos otro bar de tapas, Vino Tinto. En el sótano hay un bar tradicional con un nuevo formato moderno. En la calle se pueden tomar tapas estupendas. No se pierda la maravillosa cecina local -carne de vaca ahumada y curada al aire-.

4 Zona Plaza Mayor

Entrar en la Plaza Mayor de Valladolid te sorprenderá. Es verdaderamente el centro de la ciudad, una gran plaza pintada de rojo que concentra toda la vida de la ciudad. Para los amantes de los dulces tenéis dos buenas opciones, la moderna pastelería del
Arranz
Familia, tercera generación de pasteleros que ofrecen una exquisita variedad de pasteles y galletas. Justo en la esquina opuesta de la plaza, se encuentra la pastelería Cubero. Un café tradicional con un museo único en el que se pueden encontrar réplicas de los edificios más importantes de la ciudad hechas totalmente de azúcar.

A pocos metros de este lugar se encuentra uno de los bares de tapas más premiados de la ciudad,
Los Zagales
. Ofrecen una gran opción de tapas realmente creativas. Le encantará comer el baguetina, incluida la «bolsa de plástico» en la que está encerrada y te perseguirá el olor del humo blanco que sale de otra tapa llamada apropiadamente Aroma o hurgando con la cuchara en una de sus tapas más célebres llamada Obama en la Casa Blanca.

Después de este recorrido de creatividad y sabores modernos, a sólo un par de cuadras se encuentra
La Criolla
conocido restaurante con una gran mezcla de tradición y nuevas creaciones. Se pueden degustar setas o espárragos locales de temporada, así como un huevo que no tiene nada que ver con un huevo de verdad, aparte de que parece un huevo. Nada más cruzar la calle podemos terminar nuestro recorrido en
Villaparamesa
uno de los bares de tapas con más éxito de la ciudad y crisol de sabores y creatividad. El calamar ahumado, el fascinante k2 (un ceviche de sardinas servido en una barca de algas), la sobresaliente carrillera de cerdo en salsa de regaliz o el singular canto al vino (postre que reproduce todos los aromas de un buen vino tinto añejo), encajan a la perfección con un local de Ribera del Duero del Duero. Ribera de Duero produce algunos de los vinos más impresionantes del país, una buena gama de vinos con cuerpo que combinan a la perfección con las tapas sugeridas.

Valladolid es una ciudad segura y acogedora a sólo 50 minutos en tren de Madrid. Cualquier época del año es buena para disfrutar. La Semana Santa es una de las más importantes del país, así que en caso de que esté planeando una visita téngalo en cuenta. Pero noviembre se ha convertido en un gran momento para los amantes de la gastronomía de todo el mundo. El Ayuntamiento de Valladolid organiza cada año el Concurso Internacional y Nacional de Tapas. Es, con diferencia, el evento de tapas más importante del mundo. El hecho de que restaurantes de todo el país y jóvenes chefs de todo el mundo acudan cada año a competir mientras son acogidos por los restaurantes locales ha tenido un gran impacto en la evolución de la ciudad y su increíble oferta gastronómica.